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Por JOEL ORTEGA JUÁREZ
El lunes 24 de febrero, día de la bandera,
fui a mi barrio Popotla , tuve un encuentro inesperado con Cuauhtémoc Batres,
al que conozco desde 1958 , ambos evocamos , más o menos un pleito en la casa
de mis familiares fundada por esos años por mi abuelo Abel Ortega, la riña fue
entre los militantes del Partido Comunista Mexicano al que pertenecía mi primo
mayor José Abel Ramírez Ortega El Millones y los del Frente Obrero Comunista al
que pertenecían El Bubú Batres y sus cuates. Enrique Semo estaba por escribir
un folleto Qué es y hacia dónde marcha el Frente Obrero firmado con el
seudónimo de Enrique Flores con evidente alusión a Flores Magón, donde Semo
criticaba al FOC (los foquitos les decían) por su posturas un tanto extremistas
y llamaba a sus militantes a ingresar al PCM.
El Bubú me contó el origen de su apodo:
estábamos en el departamento de señoritas de la Escuela Nacional de Maestros
viendo pasar a las chavas , era medio tartamudo , al florear a una morenaza me trabé
solamente alcancé a decir Bu bú , ahí me
apodaron los cuates traviesos.
Bubú Batres tiene 90 años, recién
cumplidos, me lleva once años, su largo camino viene desde esos años
clandestinos hasta la fecha donde sus hijos son prominentes jefes de Morena y
la Cuarta Transformación , concepto creado por Enrique Semo a quien conozco
casi desde entonces (1963) con múltiples cosas vividas juntos y recuerdos muy gratos
de su solidaridad brindada en momentos muy difíciles para mí.
Borrar a amigos y camaradas como el Bubú
Batres y Enrique Semo, sería como mutilar mi propia vida. Hemos sido actores de
un largo camino de más de 60 años.
Examinar esa ruta, los sueños, la utopía de
asaltar el cielo y cambiar al mundo de base, es una tarea pendiente , sobre
todo es una tarea de los jóvenes que siguen planteándose la necesidad de dar un
viraje revolucionario para impedir la desaparición del planeta o al menos para
frenar las tendencias de restauración del nazismo, como los votos obtenidos por
la ultraderecha en Alemania.
Estamos viviendo una decadencia a nivel
planetario. Las corrientes más derechistas han triunfado en los Estados Unidos,
Italia, Turquía, Austria, Hungría, incluso Finlandia, eso en los países que hay
elecciones, hay regímenes dictatoriales y guerras civiles en Uganda, el Congo ,
golpes de Estado en Corea del Sur , no se diga el campo de concentración que es
Corea del Norte ahora aliado a Putin, combate con sus propias tropas a la
resistencia ucraniana. En nuestro continente están las dictaduras de Cuba,
Nicaragua, Venezuela y el abominable gobierno de El Salvador.
Aparentemente en México tenemos un gobierno de
izquierda, en realidad es un gobierno neoliberal, militarista y cada días más sometido a Trump , ello no
impide que militantes de décadas como el
Bubú Batres y Enrique Semo, consideren que hay un cambio de régimen (sin
duda lo hay pero hacia atrás baste con ver la disolución del poder judicial de
relativa autonomía , suplantado por una falsa elección universal al más puro
estilo soviético, donde todas las candidaturas son del mismo color) dicen una revolución política pacífica, un
cambio en la mentalidad del pueblo.
El pensamiento no puede tomar asiento.
Nunca hay que abatir las banderas, los ideales, los sueños libertarios.
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