jueves, 30 de abril de 2009

LA AUDIENCIA DEL SENADO SOBRE INMIGRACIÓN ES UN PASO HACIA LA REFORMA

Washington, DC—El Consejo Nacional de La Raza (NCLR por sus siglas en inglés) –la organización nacional más grande de apoyo y defensa de los derechos civiles de los hispanos en EE. UU.– elogió hoy al Subcomité de Inmigración, Refugiados y Seguridad Fronteriza del Comité Jurídico del Senado por explorar soluciones para arreglar el sistema de inmigración de nuestra nación con la audiencia, “Una Reforma Migratoria Integral en el 2009: ¿Podemos Hacerlo? y ¿Cómo?”.
“El NCLR elogia el liderazgo de Schumer, presidente del Subcomité de Inmigración, por abrir un debate constructivo sobre inmigración. Hemos permitido por demasiado tiempo que una minoría acosadora siembre la intolerancia y bloquee el camino a las soluciones. En las últimas elecciones quedó claro que los estadounidenses quieren líderes que resuelvan problemas difíciles, incluyendo el de la inmigración” dijo Janet Murguía, presidenta del NCLR.
La política de inmigración del NCLR apoya: un sistema de inmigración factible y humanitario que proteja a los trabajadores y a las familias. Dicho sistema incluirá medidas que protejan los derechos civiles y el debido proceso, así como salvaguardas que mantengan la nación segura, y estrategias de integración que ayuden a que los inmigrantes participen y contribuyan plenamente como estadounidenses.
“Una reforma de inmigración factible y humanitaria restablecerá el estado de derecho y conservará los valores de nuestra nación. También será una herramienta muy importante en la recuperación de la economía, ya que incorporará a los trabajadores al sistema, aumentará los ingresos de hacienda e igualará las condiciones para los trabajadores”, continuó Murguía.
El sistema de inmigración de la nación necesita urgentemente una reforma que restablezca la dignidad y el estado de derecho, y rechace el status quo. Un verdadero regreso a la legalidad exige que la revisión del sistema completo aborde los problemas exacerbados por más de dos décadas de negligencia. Dada la complejidad de estos problemas, es evidente que este asunto no puede resolverse de manera gradual. Para que la reforma sea una solución eficaz que sirva a los intereses de la nación deberá:
· Restablecer el orden haciendo que los 12 millones de indocumentados de nuestro país se presenten, obtengan un estatus legal, aprendan inglés, y asuman los derechos y las responsabilidades de la ciudadanía
· Crear políticas inteligentes de aplicación de la ley que conserven la seguridad nacional y defiendan la constitución de los Estados Unidos
· Incluir medidas enérgicas contra los empleadores sin escrúpulos y retirarles los incentivos si contratan a trabajadores indocumentados
· Ampliar las vías legales que reúnen a las familias y permiten a los trabajadores futuros que se necesiten venir a los Estados Unidos con derechos y protecciones que salvaguarden nuestra fuerza laboral y eviten el drástico aumento del número de muertes en la frontera
· Promulgar medidas proactivas para promover la integración exitosa de los nuevos inmigrantes a nuestras comunidades
“La reforma migratoria integral es una solución y ha llegado su momento –hay una necesidad política urgente y un imperativo moral para actuar, y si esto no fuera suficiente, es políticamente inteligente.
El NCLR y su red están listos para colaborar con la administración y el Congreso en el rechazo de la demonización de las comunidades y ponerse a trabajar en las soluciones que nuestro país ha estado esperando", añadió Murguía.

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