Foto proporcionada por Análisis a Fondo
· La partida
del poeta inauguró la última quincena de este apocalíptico año de dolor y
muerte.
Por Francisco Gómez
Maza
La ida de muchos, que
no tenían por qué haberse marchado, pero que fueron obligados por la pandemia,
o el paro del corazón, ya no es noticia. Han muerto muchos y muchas.
Miles que se fueron sin despedirse, sin una palabra de amor, sin una caricia,
sin un beso, sin un brindis.
Pero hay idas que duelen más, no porque las otras no den
tristeza, porque son de personas muy cercanas al corazón de uno y madrean el
alma.
Esta madrugada (Domingo 13 de diciembre, día de los ciegos,
después de las dos horas, cuando apenas cerraba a Eduardo Horacio Grecco y su
“Volver a Jung”, recibí la noticia de parte de Giomar: Mi padre ha muerto.
Quedé mudo. Se me estrujó el cuerpo entero. No supe que decir. Gracias mija. No
era tiempo… Pero cuando el último tres pasa de madrugada, no nos queda más que
abordarlo porque no van más que a la Gran Terminal. Y Óscar llegó ya al
destino, a la Estación final.
Se fue el amigo, el poeta, el escritor chiapaneco, turulo
(de Tonalá) para ser más exactos, Óscar Wong, amigo, poeta en todos los géneros
de la poesía en prosa y en verso; hijo del pueblo más caliente de todo Chiapas,
en donde todo, las risas de los niños, las miradas de las hermosas morenas, el
canto de los pájaros, esos que rasgan los cielos con su vuelo, el aroma del
mar, todo es poesía. Y hasta los mosquitos que depredan la piel.
Óscar era menor que este escribidor. Óscar Wong llegó
a la tierra de Tata Chico, de tía Chepita Rincón, de tío Jesús Rincón Ocampo,
de Martita Pananá, de Angelito Tejada, de tata Joaquín Gutiérrez Niño,
un 26 de agosto de 1948, tres años después de que yo llegué a Chiapa de
Corzo. Y ahí, en esos litorales, en donde los pescadores se hacen a alta
mar para cosechar el camarón, el tiburón, las parlamas, la lisa (el pescado más
delicioso de todos los mares del mundo) comenzó a ver todo, la naturaleza, con
ojos de amor. Ahí donde Beto Fuentes, el embalsamador, solía salir de pesca.
Y como todo poeta, como todo hombre de honor, como todo ser
congruente con la vida, como todo ser humano de puro corazón, se despidió del
mundo. Y se fue a descubrir la belleza de la Eternidad.
Felicidades al Paraíso. Desde la madrugada de este domingo
tiene entre sus huéspedes a un recreador de la Belleza increada.
A DESFONDO: De las 21 actividades que integran el
sector industrial,16 reportaron un alza en octubre, entre las que destacan la
industria de la madera, con avance de 8.8%; fabricación de maquinaria y equipo,
8.1%, así como la elaboración de productos de cuero y piel, 8.0%, todas
impulsadas por la actividad del sector de la construcción (6%), de acuerdo con
los registros del Inegi…. Lo más congruente con la realidad económica sería que
las reformas que aprobó el senado a la Ley Orgánica del Banco de México fueran
rechazadas por la Cámara de Diputados. No está claro nada. Nadie da su brazo a
torcer. Y si me preguntaran mi opinión diría que el cambio propuesto por el
senador Ricardo Monreal podría relajar las cosas hasta el grado de que
operadores criminales utilizaran al banco central como una lavandería de
divisas ilegales, provenientes de actividades comerciales no autorizadas, como
la demanda y la oferta de enervantes.
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