Por Armando Garcia
Editor y Fundador de Nuestra América Magazine
Una serie de protestas masivas y disturbios han estallado en todo el país provocado por el horrible asesinato de George Floyd, quien murió bajo custodia policial después de ser detenido por supuestamente usar un billete falso de $ 20 dólares en la ciudad de Minneapolis en el estado de Minnesota.
Los residentes de Minneapolis salieron a las calles a protestar y la policía los repeló utilizando gases lacrimógenos, aunque oficialmente no se han dicho cifras de muertos por los disturbios, ya hablan algunos medios de una veintena. Como respuesta los manifestantes han saqueado edificios, centros comerciales y el departamento de policía de la ciudad fue incendiado.
En redes sociales en Latinoamérica, reportan que solamente escenas como las que se ven en la televisión, se comparan con las ocurridas en México y en otros países. Pero en realidad, ya han habido otras como la de los disturbios del 29 de abril de 1992, en Los Ángeles California, como respuesta a la absolución de cuatro policías blancos de por todos los cargos conectado con la severa paliza al afroamericano Rodney King.
Ahora, una vez mas, America ha estallado en llamas contra el racismo. Las protestas se han extendido a Los Ángeles, Louisville, y continúan en otras ciudades importantes a medida que pasan los días. Ni siquiera las declaraciones gubernamentales a todos los niveles, con palabras de pacificación y lamentación han podido detener la furia de los ciudadanos que piden justicia, no solamente para Floyd y su familia, sino a todos los demás que han fallecido o lastimado brutalmente por oficiales del orden público.
Floyd murió mientras estaba bajo la custodia de cuatro oficiales; tres lo inmovilizaron mientras uno observaba y mantenía a raya a las multitudes quienes demandaban al policía que soltara a Floyd ya que no estaba poniendo resistencia al arresto, pero Derek Chauvin, quien tenía un historial de mal comportamiento policial, presionó el cuello de Floyd quien decía que “no puedo respirar” y Chauvin continuaba poniendo presión con su rodilla contra el suelo hasta que, y minutos después, Floyd dejó de respirar.
Inicialmente, los cuatro oficiales fueron puestos en licencia administrativa pagada. El 29 de mayo, Chauvin fue arrestado y acusado de asesinato y homicidio involuntario en tercer grado. Se espera que los otros oficiales enfrenten consecuencias similares.
Este arresto y los cargos no han podido que cesen de inmediato las protestas. Los manifestantes continúan exigiendo justicia para otras víctimas de la brutalidad policiaca. Lamentablemente, los disturbios violentos no están ayudando a la situación. La Guardia Nacional ha sido convocada para ayudar a restablecer el orden y hay un toque de queda en todo Minnesota.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario